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Sergio Pérez ha vuelto a dar su tarjeta de presentación a Red Bull Racing con su victoria en Sakhir. Muchos fanáticos le piden a Christian Horner que traiga al mexicano y en las redes sociales Horner parece haber cometido un error o ¿da una pista?.

El paso del diseñador Simone Resta a Haas provocó mucha discusión. El ingeniero italiano estuvo a cargo del proyecto 2022, fundamental en los planes de relanzamiento del Cavallino. La nueva regulación representa un hito fundamental para las ambiciones de Ferrari, llamado a regresar a la cima en un tiempo razonable después de la reciente debacle total.

Durante el fin de semana en Sakhir, en el difícil papel de suplente del siete veces campeón del mundo Lewis Hamilton, el joven George Russell mostró un desempeño respetable, permaneciendo tras Bottas en la clasificación y liderando la mayor parte de la carrera.

Sin dudas la emoción estuvo presente en Sakhir. No solo la primer victoria de Sergio Pérez se llevó todas las lágrimas. En F2 el hijo de Michael Schumacher, Mick alcanzó la corona de la categoría. Si bien ya tenía la confirmación por parte del equipo Haas que correría en F1 en 2021, el alemán deseaba cerrar su etapa en la categoría como campeón.

La Scuderia desperdició la oportunidad de obtener un resultado importante en el GP de Sakhir: Vettel no pudo ingresar a los puntos después de un fin de semana problemático, una vez más hubo una parada en boxes muy lenta. Mattia Binotto prefiere mirar hacia el futuro celebrando los resultados obtenidos por Mick Schumacher y los demás jóvenes de la FDA.

No hay ninguna justificación competitiva para que Red Bull no contrate a Sergio Pérez para reemplazar a Alex Albon para la temporada 2021 de Fórmula 1. En una carrera en la que Max Verstappen sale en la primera vuelta y ambos pilotos de Mercedes tienen problemas que arruinan la victoria, el segundo Red Bull debería ganar. Si llega al final, debería estar allí primero.

El piloto finlandés perdió la ventaja obtenida en la pole position ya a pocos metros del semáforo en verde, comprometiendo la credibilidad de su estancia en el equipo Brackley. Bottas siguió a George Russell durante gran parte de la carrera.