Al final de las pruebas, Leclerc dijo que estaba satisfecho con el resultado de las pruebas en Barcelona. Sin embargo, estaba allí para que todos lo vieran. El Ferrari SF1000 no fue del todo eficiente.
Sin embargo, las últimas declaraciones hechas por Leclerc directamente en video chat desde su casa en Mónaco contrastan con su optimismo mostrado al comienzo:
“Todavía creo que tuvimos algunas dificultades durante las pruebas, por lo que tenemos que recuperarnos. Lo sepamos o no, no lo sé, pero el año pasado registramos una buena progresión durante todo el año. Creo que tenemos que seguir trabajando como lo hicimos el año pasado y estoy bastante seguro de que los resultados llegarán".
El programa en Maranello fue claro. Ferrari habría comenzado en Australia este año sabiendo que no tenían el mejor auto. Analizaría los datos ofrecidos por la pista y luego ajustaría los problemas en la carrera, tratando de reducir la brecha para pelear en la cima.
Pero lo inesperado cambió los planes, complicando la posibilidad de disputar el título de F1.
Australia ha sido cancelada, al igual que muchas otras fechas de campeonato. Probablemente todo comenzará nuevamente en julio con menos fechas en el calendario. Pero, ¿cómo afectará esta reducción de carreras en el calendario de F1 a Ferrari?. Trivialmente, el plan para ajustar el tiro durante la construcción será mucho más difícil, si no imposible. Ferrari lo sabe, los pilotos lo saben, los fanáticos lo asumen.
"Será una temporada difícil para todos porque tan pronto como comience, no se detendrá y no tendremos pausa para desarrollar el automóvil más que los demás" dijo Charles. "Así que creo que el trabajo en la pista será extremadamente importante y más de lo que ha sido en todos los otros años porque pasaremos mucho tiempo en la pista a la vez que comience la temporada nuevamente".
"Será muy importante estar enfocado y listo desde la primera carrera en adelante, y nosotros los pilotos debemos ser capaces de dar la respuesta correcta al equipo y tratar de ayudarlo en la dirección correcta de inmediato". En estas palabras, aunque el campeonato de F1 no ha comenzado, surgen muchas dudas sobre la probabilidad de que el Ferrari SF1000 compita por el campeonato mundial de F1.
Porque correr ya declarando que tienes que mejorar sobre los demás es como admitir inferioridad. Dejando mentalmente derrotado. Solo mire a Red Bull para comprender el enfoque diferente. Tienen mucha confianza en el automóvil. Los resultados de la prueba fueron positivos. Pero incluso cuando no lo estaban, siempre decían que lo intentaban. Una mentalidad para apuntar a la victoria.
Los planes de Ferrari al revés son evidentes. La programación basada en el desarrollo de una máquina de bajo rendimiento en el transcurso de la temporada ahora parece aún más difícil. Reducir el calendario F1 a unos pocos GP dará menos oportunidades de mejora. Además, también hay otro razonamiento. Con el aplazamiento de la nueva regulación para 2022, el Ferrari SF1000 será la base del monoplaza también para 2021.
Como fanáticos, siempre se espera que nos contradigan los datos técnicos recopilados en la pista, pero la F1 es despiadada en este sentido. Un deporte con una alta tasa técnica y tecnológica, hace de los datos la base sobre la cual construir las victorias. Después de estas declaraciones de Leclerc, ¿puede justificarse el trabajo de la Scuderia Ferrari?. ¿O seguimos en el campo de la pretactica?.
Planear y ver el futuro son las claves del éxito en cualquier competencia. Hasta la fecha, con estas declaraciones, las esperanzas de mejoras durante el año se están desvaneciendo. Habrá poco tiempo para el desarrollo y mucho más tiempo para competir en un automóvil no competitivo. ¿Ferrari ha pensado en un plan B?. En la vida como en los GP de F1, lo inesperado está a la vuelta de la esquina. Y de las declaraciones de Leclerc no parece haber un plan B.
Esperamos que se demuestre lo contrario entre las curvas. Después de todo, entre las declaraciones, el quizás y el pero, la pista es lo único que importa.
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