El líder de HRC reconoce que los malos sentimientos en la parte delantera de la máquina se mantuvieron igual que en 2019. Puede que aún no se haya recuperado completamente de la operación de su hombro, es el nivel de el RC213V que lo preocupa más que nada.
Fue en una caída que Marc Márquez terminó el domingo una sesión de práctica muy complicada para él, durante la cual parecía limitado por un hombro que todavía se recuperaba de su operación a fines de noviembre. El piloto español también lo puso directamente en cuenta por su condición física imperfecta, destacando en particular su falta de fuerza en el deltoides, el músculo que forma la curva del hombro.
"Este es el día en que pongo el mayor esfuerzo en la moto", explica. "A mediados del día ya estaba destruido, pero aun así traté de salir a la pista por la tarde. Tuve una pequeña caída en la curva 15. Fue más debido a mi condición física. Estaba en la curva, ya estaba girando, pero me faltaba fuerza. Es bueno alcanzar este límite, pero si podemos evitar la caída, ¡es mejor!".
"El sábado y el domingo cuando intenté volver a la tarde, estaba demasiado cansado. Los músculos son difíciles de activar. Y así fue como tuve esta pequeña caída", agregó. "Cuando pierdes tu condición física, pierdes la concentración, y en un giro en el que normalmente habría alcanzado mi codo, en el momento en que perdí un poco en la parte delantera, simplemente dejé ir la moto".
El sábado, fue entonces cuando estaba frente a su hermano en la curva 3, descansando precisamente en el lado derecho de su cuerpo que se deslizó hacia el exterior. "Desafortunadamente, cuando iba a regresar al box, cuando ya había terminado el día, pasé por alto una parte sucia y no sé por qué, tal vez porque estaba cansado. Si miramos el giro decimos '¡guau, es un giro rápido!' pero fui lento, así que no fue una gran caída. Debes estar concentrado al 200% porque con una condición física así tienes que estar aún más concentrado para evitar este tipo de cosas", dijo.
"El deltoides es de alrededor del 60%, mientras que los otros músculos se están acercando cada vez más a estar en la cima. Es cierto que esperaba que este músculo no me afectara mucho como piloto de moto, pero en realidad lo es", dijo el piloto español. "Además, este circuito es uno de los más difíciles para estar en forma y sufrí durante estos tres días. Pero así es como tengo que sufrir ahora si quiero estar listo para la carrera de Qatar".
Las mismas sensaciones que en 2019 con la parte delantera del Honda. A pesar de estos dos inconvenientes, que se agregaron a las limitaciones que tuvo que imponerse tanto en su tiempo de carrera como en las pruebas que se llevarán a cabo para Honda, aseguró el actual Campeón del Mundo al final de prueba que estaba más preocupado por el progreso que se haría en el RC213V que por su condición física todavía imperfecta un mes antrs del primer Gran Premio. De hecho, la máquina tiene un carácter tan complejo como su predecesor, con un motor que empuja demasiado al entrar en las curvas y una falta de tracción en la recuperación.
"En cuanto a la forma física, por supuesto que me gustaría mejorar, pero ya he visto durante estos tres días que, incluso si no fuera tan bueno como esperaba, lo hice cuando incluso tenía un buen ritmo, especialmente el domingo. Sería mejor estar en mejor forma, pero estoy más preocupado por el aspecto técnico. Tenemos que seguir trabajando", dijo. "Los principales comentarios que hicimos, Cal [Crutchlow], Álex [Márquez] y yo, son los mismos y apuntan en la misma dirección que el año pasado".
"Todavía no hemos mejorado mucho en el hecho de que el la moto empuja la última parte [de la entrada] y la tracción en la salida, aquí es donde tenemos que seguir trabajando y analizar las cosas paso a paso, no se puede cambiar mucho, pero con el chasis, lo más importante será mejorar el agarre al final de las curvas".
Si bien Crutchlow señaló el sábado que las sensaciones en la parte delantera de la máquina son tan malas, si no más, que en 2019 cuando el # 93 fue el único capaz de domar al Honda, él mismo confirma: "Básicamente, tengo los mismos sentimientos que el año pasado. Aquí es donde tenemos que trabajar, para tratar de entender cuál es el problema, si proviene del chasis o del motor. Aquí es donde tenemos que seguir trabajando, que tratamos de analizar todo, pero creo, como dije el año pasado, que en el motor, nos falta algo".
"Como siempre, las respuestas con respecto al aspecto técnico provienen de la competencia: si nuestros oponentes progresan mucho, significa que tenemos que seguir trabajando y Suzuki y Yamaha parecen haber progresado mucho", agregó Marc Márquez, quien reconoce, sin embargo, que "No fue de mucha ayuda durante estas pruebas, precisamente por este hombro que aún no está nivelado".
"Concentraron un poco más de trabajo con Cal. En los últimos días, he probado algunas características nuevas para tratar de evaluar mis sensaciones, pero cuando paré, inmediatamente dije que no podía hacer comentarios precisos, porque no estoy conduciendo como quiero. Empujo mucho con la mano izquierda y eso crea más sensación de pérdida desde el frente. Por el momento, solo estoy tratando de entender, pero en Qatar espero mejorar y poder tratar de averiguar qué camino tomar".
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