A sus 24 años, Fabio Quartararo inicia su sexta temporada en MotoGP, categoría en la que siempre ha corrido con una Yamaha, ganando el título en 2021 y 11 victorias de 2020 a 2022.
También segundo en el campeonato hace dos años, no gana una carrera hace temporada y media, sigue exigiendo una reacción de Yamaha, que tarda en materializarse.
El año pasado, cuando sólo obtuvo tres podios y una décima plaza en el campeonato, Quartararo lanzó varios ultimátums a la dirección del fabricante, desesperado por la falta de velocidad de su M1.
Muy claro sobre sus expectativas y las consecuencias sobre sus posibilidades de renovar su contrato con Yamaha, el francés empujó a Yamaha a reaccionar.
Así, hemos visto a la marca redoblar sus esfuerzos para fortalecer su equipo técnico, con la llegada del diseñador de motores Luca Marmorini y luego la caza furtiva de dos perfiles importantes de Ducati: Max Bartolini (nuevo director técnico) y Marco Nicotra (aerodinámico).
El objetivo es subir una marcha para reducir la diferencia con la Desmosedici: "Hubo una respuesta a lo que pedí, incluso si el resultado tal vez no sea el que quería", dijo el piloto francés a Motorsport.com al margen del último día de pruebas en Sepang la semana pasada.
"Ya he tenido contactos iniciales con otras marcas, pero Yamaha ciertamente lo sabe. Ahora depende de Yamaha ver qué hacer. Estoy bastante contento con lo que han hecho, pero es cuestión de ver cómo van a evolucionar las cosas en el corto plazo".
Aunque ocho décimas por delante de Pecco Bagnaia en la clasificación final de las pruebas realizadas en Malasia, el francés subrayó el importante cambio que Yamaha ha realizado en su planteamiento, consciente de los esfuerzos realizados para intentar volver a la victoria.
“Ha habido un gran cambio en Yamaha”, subrayó. "Está claro que no me gusta estar tan lejos y cuando vuelvo a boxes no lo hago con una sonrisa, pero ahora estamos trabajando de forma mucho más agresiva. En el pasado se decía en broma en el paddock que los ingenieros de Yamaha eran siempre los primeros en ir al hotel. Actualmente están trabajando muy duro. Llega gente nueva, de un fabricante ganador que no está nada decepcionado".
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