Ir al contenido principal

Pérez y las órdenes de equipo: "No tenemos un código de conducta dentro del equipo"

 


La llegada de Sergio Pérez a Red Bull está temporada, si bien generaba mucho entusiasmo a la vez traía consigo algunas dudas sobre si el piloto mexicano podría adaptar su condición al RB16-B.


Muchos dijeron que Sergio necesitaría cinco carreras para alcanzar el nivel de conducción y velocidad de su compañero Max Verstappen, pero Checo ya está demostrando que la diferencia con el holandés en pista cada vez es más pequeña. En conversación con AUTOhebdo, el mexicano explica a qué se ha tenido que acostumbrar, al mismo tiempo que discute algunos temas generales dentro del equipo, como las órdenes entre compañeros.

"Tenemos diferentes estilos de conducción, pero al final pedimos las mismas cosas", comienza diciendo Pérez. El Red Bull tiene algunas características que no son adecuadas para todos los pilotos. Por ejemplo, el coche tiene mucho agarre en la parte delantera, algo que le gusta a su compañero de equipo Verstappen: "El viernes exploraremos el coche a nuestra manera y luego continuaremos construyendo en la dirección que consideremos mejor".

''De esa manera llegamos a un escenario que puede no ser muy cómodo, pero ciertamente es efectivo. El coche es más difícil de conducir, pero más rápido”, prosigue Pérez, a quien no se le ha regalado un coche que pueda personalizar al 100%. Sin embargo, parece estar mejorando en el manejo del auto. Sin embargo, los hombres de Red Bull no hacen exactamente lo mismo en la puesta a punto, admite Pérez.

“Hay una pequeña diferencia entre Verstappen y yo. Ajuste más mi coche para la carrera". Pérez habla sobre el chasis y el equilibrio que experimenta en el coche, pero luego también echa un vistazo al motor. Después de todo, desde su llegada a Red Bull, ha estado trabajando con el motor Honda, mientras usa la potencia de Mercedes durante años.

“El motor es tan importante. Trabaja de manera diferente con el motor Honda que con el motor Mercedes. Lo opera de manera diferente y también transfiere energía de una manera diferente. Tienes que acostumbrarte a eso''. Además, Pérez destaca dos puntos más importantes en la entrevista. En primer lugar, se ocupa de las órdenes de equipo. Los pilotos de Red Bull no los entienden, pero en Francia, por ejemplo, se pudo ver que dejó pasar a su compañero de equipo Verstappen con facilidad.

''No tenemos un código de conducta dentro del equipo. Tenemos la edad suficiente para entender que el equipo es lo primero y hay que actuar en el mejor interés del equipo”. También analiza una posible extensión de contrato que podría obtener en Red Bull. El desempeño de Pérez no ha sido decepcionante hasta ahora y es el primer compañero de equipo de Verstappen quien puede ayudarlo de alguna manera en la pelea por el título.

"Un piloto hace lo mejor que puede, ya sea que tenga un contrato de un año o más. La presión extra es buena para mí y también para el equipo. El objetivo es sacar siempre todo el potencial del auto”, concluye el piloto mexicano.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El C44 le empieza dar vida a Audi

  En el espléndido Gran Salón del Guildhall de Londres, un castillo inglés que data del siglo XV, Sauber abre el interludio que separa la era Alfa Romeo de la era Audi con la presentación del C44, el primer monoplaza del nuevo equipo.

Bottas: “El nuevo C44 definitivamente se siente diferente"

El auto de 2024 del equipo Stake F1 se presentó en el entorno histórico del Guildhall de Londres, pero no tenía nada de convencional ni formal.  Había cierta inquietud en el evento, la sensación de estar al comienzo de una nueva era, de ser testigo del nacimiento de una nueva forma de competir.

Red Bull le pidió la renuncia a Horner

  Después del sensacional paso de Lewis Hamilton a Ferrari, otra noticia explosiva corre el riesgo de desestabilizar la Fórmula 1. La posición de Christian Horner como director del equipo Red Bull es, de hecho, objeto de una fuerte discusión después de que el británico fuera criticado por un comportamiento inapropiado hacia un empleado de el equipo.