Ir al contenido principal

Río parece quedarse sin F1, Interlagos le gana el pulso


El Gran Premio de Brasil se ha celebrado en el Autódromo José Carlos Pace, más conocido como Interlagos, desde 1989 y parece que eso no cambiará en el futuro cercano tras una decisión de la justicia de Río de Janeiro.
Parece que Río de Janeiro ha admitido la derrota en su intento de arrebatarle el Gran Premio de Brasil a Sao Paulo tras los comentarios de los oficiales. El proyecto, respaldado por el presidente Jair Bolsonaro y Marcelo Crivella, habría visto una pista de carreras construida en el bosque de Camboata. Sin embargo, el nuevo alcalde Eduardo Paes ha perdido poco tiempo en descartar el acuerdo luego de una protesta por su impacto ambiental y los informes negativos.

"Necesitamos estar hablando de recuperar espacios verdes, no de destruirlos", afirmó la alcaldía luego de anunciar que instruyó al instituto ambiental del estado de Río de Janeiro para terminar con el proceso de permisos. La medida acaba con las esperanzas de Río de albergar el Gran Premio de Brasil, un honor que tuvo por última vez en 1989. El evento inaugural en 1972 se llevó a cabo en Interlagos antes de mudarse a Río en 1979 y luego de 1981 a 1989. Como resultado, la carrera permanecerá en la pista de Interlagos de Sao Paulo hasta 2025 después de que se firmara un nuevo acuerdo el año pasado.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El C44 le empieza dar vida a Audi

  En el espléndido Gran Salón del Guildhall de Londres, un castillo inglés que data del siglo XV, Sauber abre el interludio que separa la era Alfa Romeo de la era Audi con la presentación del C44, el primer monoplaza del nuevo equipo.

Ferrari va por un peso pesado de Red Bull

  El caso Horner podría allanar el camino hacia Maranello para una de las caras de Red Bull: Ferrari lo intenta, el ingeniero duda. Hablamos de Pierre Waché. El número dos del departamento de diseño del equipo austríaco.

Bottas: “El nuevo C44 definitivamente se siente diferente"

El auto de 2024 del equipo Stake F1 se presentó en el entorno histórico del Guildhall de Londres, pero no tenía nada de convencional ni formal.  Había cierta inquietud en el evento, la sensación de estar al comienzo de una nueva era, de ser testigo del nacimiento de una nueva forma de competir.