La FIA en busca de evitar que en el futuro los coches o sus partes se copien de nuevo, han emitido normas detalladas que son vinculantes con efecto inmediato. Esto debido al caso de Racing Point y su monoplaza 2020 el cual para muchos es una copia del Mercedes.
Según estas reglas, los equipos de Fórmula 1 ya no podrán editar las grabaciones de los coches con software para obtener datos digitales sobre los coches. Los escáneres 3D o dispositivos similares ahora también están prohibidos, lo mismo se aplica a los escáneres o proyecciones de superficie. También se prohíbe el intercambio de propiedad intelectual.
Nikolas Tombazis, como jefe de la Comisión de Fórmula Uno de la FIA, ya había anunciado tales medidas: "Esto evitará que los equipos usen fotos para copiar grandes áreas de otros coches, como hizo Racing Point. Seguimos aceptando que los componentes individuales se copien en áreas individuales. Pero lo que no queremos es que un coche sea virtualmente una copia de otro coche".
Las nuevas reglas establecen que "un diseño puede ser influenciado por el diseño o concepto de un competidor. Sin embargo, sólo se podrá utilizar para este fin la información que esté potencialmente disponible para todos los competidores".
En caso de duda, la federación mundial se reserva el derecho de iniciar una investigación si se encuentran similitudes sospechosas en las partes enumeradas. Se pide a los equipos que demuestren que han creado su diseño de forma independiente. De nuevo un extracto de las reglas: "El papel de la FIA es determinar si la similitud se debe a la ingeniería inversa, o si se hizo una invención legítima".
Nada de esto se aplica ya al caso de Racing Point. Porque: Las nuevas reglas sólo se aplican después del comienzo de la temporada 2020. Todo lo que se usó en la primera carrera del año y antes será considerado legal. Y el Racing Point RP20 en su forma actual podría no sólo correr en el 2020, sino también en el 2021. En el curso de una protesta de Renault, se demostró que Racing Point había roto las reglas del RP20.
El equipo fue encontrado culpable de usar un diseño de Mercedes para los ejes de los frenos traseros. A esto le siguió una multa de 400.000 euros y la pérdida de 15 puntos en el campeonato de constructores de Fórmula 1 de 2020.
Comentarios
Publicar un comentario