Para no cambiar a eléctrico, sino continuar su camino hacia la neutralidad de carbono, F1 pedirá a los fabricantes de motores que utilicen biocombustibles. Shell ya ha lanzado el desarrollo de un superetanol dedicado a la competencia.
La reducción de las emisiones contaminantes es una prioridad en el mundo del automóvil, y este tema llega más a la competencia, donde los motores están sujetos a restricciones mucho más importantes y donde el rendimiento deseado es superior, y especialmente prioritario, a la competencia.
Limpieza del motor. El reglamento F1 2021, retrasado a 2022 debido a COVID-19, requerirá que los fabricantes de motores usen biocombustibles. Al igual que lo que encontramos en la bomba, los proveedores de combustible trabajan en un E10, es decir, un combustible con 10% de etanol. Este es un derivado del alcohol y tiene propiedades que podrían ayudar a los fabricantes de motores, como explica Benoît Poulet.
"El aspecto interesante para el rendimiento del automóvil es similar al de poner un gel refrigerante en los dedos, se siente este efecto frío. Será lo mismo para los motores", detalla el director de desarrollo de F1 de Shell, en Motorsport.com. "Enfriará partes del motor y podría ser rentable. Estamos trabajando muy duro en eso".
"Las propiedades son bastante interesantes en términos de combustión, y creo que podemos hacer cosas interesantes, descubrimos que el efecto de enfriamiento es bueno para el motor".
De hecho, el etanol tiene diferentes características de vaporización en comparación con el combustible convencional, y los ingenieros quieren explotar este efecto de enfriamiento durante el ciclo de combustión, lo que aumentaría la potencia de los propulsores. La diferencia de temperatura también podría explotarse para modificar la propiedad de los gases que salen del escape y, por lo tanto, su efecto aerodinámico en la parte trasera de los monoplazas.
Benoît Poulet explica que los empleados de Shell que trabajaron en el E10 en el sector del automóvil de carretera fueron asignados al proyecto, y que la reflexión comenzó tan pronto como se anunció el uso futuro de este 10% de etanol en motores F1.
"Es un gran desafío, pero estamos muy contentos de cambiar al combustible E10, y para ser sincero, estaríamos encantados de poner más del 10%. Tenemos empleados trabajando en este proyecto y para quienes el E10 es familiar. Es un gran cambio porque el etanol tiene diferentes propiedades de otros hidrocarburos".
"Así que realmente decidimos comenzar temprano. Es un poco como los departamentos de chasis de los equipos, comenzamos tan pronto como se publicaron las reglamentaciones. En la gestión de proyectos, dediqué a una persona a tiempo completo a este tema y ahora tenemos una buena comprensión de los beneficios de E10".
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