El campeonato WRC 2020 entra en la larga temporada de eventos de pista de tierra, que comienza desde la tercera ronda programada este año, que es el Rally de México.
Después de las carreras de Montecarlo y Suecia, los equipos abandonan la vieja Europa y se mudan en el continente americano por un período que continuará más tarde con Argentina (también debe haber habido Chile, luego omitido debido a las turbulencias políticas y sociales).
Por supuesto, la sombra del coronavirus se ha extendido a México, con restricciones en el acceso al país para evitar infecciones: en este momento, sin embargo, la situación está bajo control y el evento está confirmado, aunque con una serie de recomendaciones. seguridad para el público y profesionales.
El Rally de México, nacido como Rally America, es un evento que con el tiempo (a través de algunas fases de parada) ha sufrido una serie de transformaciones desde aquel lejano 1979 en el que nació el embrión de la carrera que conocemos hoy. Solo en 1998 la prueba encontró su hogar definitivo (al menos hasta ahora), a saber, el estado de Guanajuato, área central de México, y para ser precisos con la ciudad de León, a 400 km de la Ciudad de México, como punto de apoyo: la carrera se convierte así en el Rally Corona de México.
Unos años más tarde, en 2004, la entrada en el WRC, convirtiéndose así en la tercera ronda del campeonato y, en los últimos tiempos, en la que inaugura la temporada en la pista de tierra del Campeonato Mundial. Finalmente, en 2010 tomó el nombre de Rally Guanajuato México, con motivo de las celebraciones por el centenario de la Revolución Mexicana y también por los doscientos años de la independencia del país.
La edición de este año se encuentra entre las más largas en 2020, pero en 2007 el kilometraje total del Rally de México alcanzó menos de 850 km en total (poco más de 360 km), el más bajo en la historia del WRC hasta última edición del Rally de Suecia, que alcanzó un récord de menos de 180 km de carrera.
En 2009, el evento saltó por razones de rotación en el calendario, mientras que en 2016 hubo una de las etapas especiales más largas en la historia del WRC, o los ochenta kilómetros de la PS20 en Guanajuato, casi una prueba de resistencia. Entre los otros eventos curiosos relacionados con el Rally de México, que evidentemente es un presagio de momentos de culto, el vuelo del Ford Fiesta WRC de Ott Tanak en un espejo de agua en 2015, con el auto cayendo (pero afortunadamente la tripulación salió intacta) de esa desgracia).
Sin embargo, el año anterior, Thierry Neuville y su copiloto Nicolas Gilsoul se vieron obligados a utilizar el patrocinador oficial de cerveza del evento como líquido para el radiador de su Hyundai i20 Coupé WRC (ver para creer). El récord de éxito recae en Sébastien Loeb con seis triunfos, desde 2007 (primer éxito con el nuevo Citroën C4 WRC) hasta 2012. Sébastien Ogier sigue a con cinco, incluida su reciente victoria el año pasado.
El Rally de México lleva a las tripulaciones desde los climas invernales hasta el primer evento con temperaturas decididamente más cálidas, alrededor de 30 grados centígrados y un poco más. Esto siempre representa un factor de presión tanto para las tripulaciones como, sobre todo, para los automóviles, en sus componentes, como el motor y las transmisiones. Motores que se pondrán a prueba incluso desde la altitud que durante el fin de semana alcanzará el punto más alto a 2.737 metros, que tendrá lugar en la prueba especial de Ortega: tal contexto podría hacer que los motores de los automóviles pierdan 20% de su poder, ya que al aumentar la altitud, la presión disminuye y el aire se vuelve menos denso y más enrarecido.
Los motores endotérmicos, que por lo tanto utilizan procesos de combustión, necesitan oxígeno para desencadenar estos ciertos procesos: oxígeno que disminuye a gran altura (aunque los turbocompresores tienen la capacidad de aumentar la densidad del aire, evitando así las caídas de potencia). En cualquier caso, la relación entre combustible y aire, es decir, la mezcla, cambia, con un suministro menor del primero si no desea desperdiciarlo. Por lo tanto, las aceleraciones requerirán más tiempo en caso de que haya menos potencia en el motor, con el riesgo de que los errores se puedan pagar más antes de poder comenzar de nuevo.
Sin embargo, más allá de la física pequeña, el Rally de México es el primer evento del año en tierra y, por lo tanto, la primera prueba para la instalación de los autos en el suelo. Las segundas vueltas hacen que los caminos sean más insidiosos, aunque hablamos de caminos de tierra no tan implacables como en otras pruebas del calendario del WRC. Los neumáticos medios hacen su debut, para usarse principalmente en los primeros pases, y los neumáticos duros, generalmente requeridos en las vueltas de la tarde, cuando las temperaturas aumentan.
La edición 2020 se llevará a cabo como una tradición ahora, como hemos visto, en el área del estado de Guanajuato (el parque de servicios se ubicará nuevamente en León). La ceremonia de apertura tendrá lugar en la ciudad del mismo nombre el jueves 12 de marzo, seguida de las primeras etapas especiales, las dos cortas Street Stage GTO. Al día siguiente, el programa de pista de tierra que llevará a las tripulaciones a través de la Sierra de Lobos y la Sierra de Guanajuato durante el fin de semana.
Comienza el viernes 13 con el clásico El Chocolate y Ortega a gran altura, así como con Las Minas, que se repetirá más tarde. Un comienzo entre ascensos vertiginosos, curvas cerradas, secciones más rápidas, descensos y curvas a voluntad. También el viernes aquí está la etapa especial del Parque Bicentenario, que sigue a la segunda vuelta de las etapas de la mañana y que se cubrirá dos veces a lo largo de la pista de carreras en el área de León. El día termina con otra prueba de la ciudad, pero solo 730 metros, lo que lo convierte en el PS más corto de la historia del WRC.
El sábado 14, las montañas volverán a ser los maestros del programa. Comienza con Guanajuatito, seguido por Alfaro y Derramadero, quienes regresan al Rally de México; Estas tres etapas especiales se correran por segunda vez en la tarde, lo que concluirá la reactivación del circuito de León y una nueva etapa de la ciudad. Las últimas tres etapas están programadas para el domingo con la más larga de este año, las Otates de casi 34 km y el Power Stage de El Brinco.
En total tendremos 24 etapas especiales, un total de 959.25 km, de los cuales 324.85 km.
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