Los organizadores del GP de Bahréin han detenido la venta de entradas para la segunda carrera del Campeonato Mundial mientras se evalúa la situación del coronavirus.
Una declaración del Circuito Internacional de Bahrein dijo que si las circunstancias lo permiten, se lanzarán más boletos en una fecha posterior, mientras que también deja abierta la opción de dar reembolsos si se considera que el lugar tiene que disminuir el tamaño de la multitud de la cifra actual. Un portavoz del lugar se negó a comentar sobre qué porcentaje de los boletos disponibles ya se han vendido.
El circuito dijo que quiere celebrar un evento "seguro y emocionante", y ha estado trabajando con los departamentos gubernamentales para mitigar la propagación del virus: "A la luz del continuo brote global de COVID-19, el BIC ha anunciado que irá reduciendo gradualmente las ventas de boletos para el Gran Premio para garantizar que se cumplan las pautas de distanciamiento social apropiadas", dijo el comunicado.
"A medida que surgen más hechos, el BIC se comunica estrechamente con la Administración de Fórmula Uno y las autoridades de salud del Reino para evaluar la situación en desarrollo y liberar más boletos o reembolsar el valor nominal de los boletos dependiendo de las circunstancias y el asesoramiento médico actualizado".
El circuito también está agregando instalaciones en el lugar: “Este paso de precaución se ha introducido junto con una serie de medidas de salud pública antes del Gran Premio para garantizar la seguridad de todos los espectadores, equipos y personal del circuito. Estos incluyen procedimientos de detección a la entrada, instalaciones médicas especializadas en el lugar, saneamiento mejorado en el circuito, estaciones de lavado de manos adicionales, puntos de información para los fanáticos, así como protocolos médicos específicos para manejar cualquier caso sospechoso de COVID-19".
La carrera ha sido cuestionada debido a restricciones en los viajeros que han estado en países afectados durante los 14 días anteriores a su llegada, incluidos Japón e Italia. Además, ha habido restricciones en los vuelos desde Dubai, una ruta popular para los viajeros de F1 que usan Emirates Airlines desde Melbourne. BIC dijo a principios de esta semana que está trabajando con F1 y el gobierno para minimizar cualquier problema de inmigración.
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