Análisis GP de Mónaco

Héctor Lofredo

f1.com

El Gran Premio de Mónaco es sin dudas una carrera que año tras año nos deja alguna emoción. En está edición, una carrera que estaba siendo lineal en la punta de la carrera, con un Lewis Hamilton al más alto nivel de conducción se tornó dramática con un final al mejor estilo de Hollywood.

Es que las carreras en el principado siempre son emocionantes, nunca falta algún espectador que opine que se aburre mirando el Gran Premio de Mónaco. Este año nos encontrábamos con Mercedes jugando a esconder, escondió durante las tandas de entrenamientos su verdadero potencial que sacó a la luz el sábado en clasificación. Ferrari se encontró con un alarmante problema para que la opción blanda de Pirelli tomase temperatura.

Es bueno decir que nos encontramos con días previos con bajas temperaturas, solo el domingo se llegaron a temperaturas normales para la época del año en Mónaco. Esta baja en la temperatura tambien baja el rendimiento de los autos rojos. Más se notó en Kimi que a esa perdida de rendimiento le sumo algunos errores en la conducción. Justo en la semana en que Arrivabene salió a defender al piloto de Finlandia asegurando que su renovación es eminente. Así y todo llegó al podio, ha estado en todos desde que comenzó la temporada marcando un nuevo record.

Ahora viene Canadá donde el monoplaza debería sufrir según los dichos de su jefe. Es por todos sabido que el motor tiene potencia, pero deberá penar en las curvas del Giles Villeneuve. Siempre se dijo que el circuito del principado es donde el piloto tiene más incidencia y por lo tanto su conducción resalta más. Este fin de semana nos encontramos con un soberbio Max Verstappen que demostró un talento innato, cometiendo errores que son parte del aprendizaje de que en Mónaco es casi imposible adelantar. El equipo Toro Rosso mostró una competitividad muy buena, no olvidemos que sus pilotos eran debutantes en estas calles a los mandos de un F1.

Williams cedió terreno en el Campeonato de Constructores al equipo Red Bull. Es que la escudería británica tuvo un verdadero infierno el fin de semana. No logro que el chasis de su monoplaza calentase las Pirelli por lo que la clasificación fue penosa, la peor del año. En carrera largando tan atrás fue un suplició. Smedley fue claro al declarar que no se pueden permitir esta clase de carreras.

El que debe haber recuperado la sonrisa debe ser Helmut Marko. Al ver a sus chicos peleando por el podio. Seamos realistas las características del trazado le han dado una buena mano al equipo de la bebida energética. Kvyat que han manifestado que no tiene asegurado su asiento a futuro, salió muy agresivo, adelantando a su compañero dese la largada. Sobre el final comete un error en intentar sobrepasar a Kimi. El cuál fue investigado y no recibió sanción. Ambos monoplazas terminaron a las puertas del podio. Se acercaron a Ferrari en termino de velocidad, pero en la próxima carrera se verá realmente donde están ubicadas estas tres escuderías.

En Lotus encontramos un nuevo abandono de Maldonado, esta vez problemas en los frenos. Tuvo una atractiva lucha en pista con Hülkenberg que incluyó un toque en la zona de la piscina. Es que Force India también recuperó competitividad en este trazado. Donde repetimos el piloto tiene un papel protagónico y Nico Hülkenberg demostró unas condiciones que lo han llevado a que equipos de la talla de Ferrari se fije en él. Estas dos escuderías deberían volver a sus problemas en Montreal. Force india que hasta Silverstone no introducirán evoluciones, si el nuevo chasis pasa el crash test. Lotus no tanto porque ha venido mostrando pequeños progresos que lo hacen ser fuerte en la mitad del pelotón.

Sauber, el peor fin de semana. Uno de los puntos altos del monoplaza es la velocidad de punta. En éste circuito padeció sobre manera las carencias aerodinámicas y estuvo en el fondo de la tabla de tiempos todo el fin de semana. En el fondo de la clasificación encontramos a Manor que si bien esta progresando en materia de tiempos y fiabilidad, es un progreso lento. Todavía esta lejos de marcar tiempos competitivos pero esta logrando llegar a la bandera a cuadros con los dos coches. En resumen en Mónaco se confirmó que Mercedes anda bien en cualquier circuito,que Ferrari es la amenaza pero que todavía no es real, como para pelear mano a mano en pista. No tenemos un parámetro para decir a ciencia cierta el avance de Red Bull. Debemos esperar a la próxima cita del mundial para ver en velocidad los avances de Renault.

En Canadá todas las dudas dejadas en Mónaco quedarán claras. El circuito de Montreal, es veloz y tos lo contrario al del principado.

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