2024 tendrá que ser necesariamente el año de la redención para George Russell, recién salido de un decepcionante octavo puesto en el campeonato Mundial de Pilotos del año pasado, conseguido tras obtener sólo dos podios en 22 Grandes Premios.
Para el ex talento de Williams, este tercer año en Mercedes será crucial, dado que con la despedida de Lewis Hamilton en 2025 deberá desempeñar el papel de punto de referencia para el equipo de Brackley.
Russell habló hoy en la presentación del nuevo Mercedes, el W15, que la fábrica británica espera que suponga un importante paso adelante respecto a los coches de los dos últimos años, nacidos bajo una estrella desafortunada.
Subrayó su confianza en el equipo, al tiempo que explicó qué características espera ver mejoradas en el nuevo coche en comparación con su progenitor.
“Durante las dos últimas temporadas hemos aprendido y crecido como equipo no ha sido un paseo por el parque, pero realmente creo que el viaje que hemos recorrido nos hará más fuertes a largo plazo. Todo el equipo ha trabajado muy duro y esperamos haber dado un paso adelante con el W15”.
“Hemos progresado en algunas de las características más negativas del W14 durante el último año, pero todavía teníamos una ventana operativa estrecha y, cuando salimos de ella, el coche era difícil de conducir. Si podemos seguir ampliando la ventana operativa del coche, esto nos dará confianza como pilotos y a partir de ahí será más fácil encontrar tiempos de vuelta".
"La F1 es un deporte increíblemente difícil. Es muy difícil ganar. Y por eso nos gusta. Cada mujer y hombre en Brackley y Brixworth está enfocado en llegar a la cima. Sigamos con este enfoque y dedicación hasta 2024 y no puedo esperar a ver adónde nos lleva”, concluyó.
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