Aston Martin Racing ha presentado esta mañana su nuevo monoplaza, el AMR24, con el que intentará hacerlo mejor de lo visto en 2023 y entrar con firmeza en las filas de los mejores equipos de Fórmula 1.
El AMR24 fue presentado en su sede de Silverstone, sobre el pesan grandes y enormes expectativas. Los de la propiedad, el siempre exigente Lawrence Stroll por la cantidad de recursos invertidos en este proyecto. Pero también los de los aficionados, los aficionados, los pilotos y el propio equipo.
El AMR24 tiene unas características que van en contra de la tendencia con el resto de monoplazas presentados hasta el momento. El morro, por ejemplo, es más corto y está unido al alerón en el segundo elemento, no en el primero como hemos visto en Haas, Alpine y Racing Bulls. Pero esta no es la única noticia.
El push rod es el sistema elegido por los ingenieros dirigidos por Dan Fallows tanto para la suspensión delantera como para la trasera, mientras que en 2023 eran pull-rods en la trasera, pero está claro cómo los primeros siguen la dirección tomada por Red Bull debido a la inclinación del mismo, permitiendo que el aire fluya hacia la parte central de la carrocería, especialmente hacia la entrada de los canales Venturi.
Los vientres del AMR24 siguen teniendo el abocinamiento, que llamamos bañera, en la superficie superior, pero tienen una entrada de aire más pequeña que en 2023.
Uno de los puntos fuertes del equipo lo representan los pilotos. Fernando Alonso volverá a ser el hombre de imagen del equipo no sólo por su popularidad en todo el mundo, sino sobre todo por su talento y ganas de lograr grandes resultados en las máximas categorías de monoplazas del automovilismo y, por qué no, también alcanzar su 33º victoria que llevaba esperando mucho tiempo y que el año pasado sólo estuvo cerca.
El equipo también espera señales importantes de Lance Stroll, autor de varios altibajos en 2023 que le llevaron a terminar muy por detrás de su compañero en el Campeonato de Pilotos. Ser hijo del dueño del equipo es una gran seguridad laboral, pero en un mundo tan particular como el de la F1nada se da por sentado, basta pensar en el sensacional traslado de Lewis Hamilton a Ferrari que tendrá lugar en 2025.
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