Hay proyectos que nacen mal, y Mercedes vuelve a tropezar con la misma piedra un año más. Todo parece indicar que el W14 no es el producto que el equipo alemán pensaba colocar en pista. Bahréin trajo más problemas para el equipo de Brackley.
Es por eso que solo se han recogido voces críticas desde el domingo en adelante. Desde Lewis Hamilton susurrando que el equipo no escucho sus comentarios sobre el nuevo monoplaza pasando por Shovlin diciendo que los cambios son tantos que se necesitará mucho tiempo para llevarlos a cabo.
Toto Wolff fue tajante al manifestar que "El W14 está listo para la papelera ”. Luego de las pruebas el panorama no era muy alentador para el equipo, pero el desempeño en carrera dejó al equipo en el cuarto lugar del campeonato de constructores perdiendo con Aston Martin. Para Wolff el equipo no fue capaz de cerrar la brecha con los punteros sino que perdió más ante Red Bull. Según Wolff los pasos atrás del equipo fueron significantes y significaron un golpe duro.
El W14 tiene tantas áreas para mejorar que pensar en una versión B del mismo es descabellado. El equipo estaría pensando en algo más radical. Según informa el diario alemán Auto Motor und Sport, el 'nuevo' Mercedes 2023 hará su debut en Imola previsto del 19 al 21 de mayo.
Además del tiempo necesario para perfeccionar un proyecto ya considerado y en curso en invierno, la logística hace que el debut en Miami sea desfavorable, mientras que en Bakú, el formato Sprint ciertamente no es la mejor ayuda para los experimentos con sólo una sesión de práctica antes de la Clasificación ya prevista para el viernes.
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