Max Verstappen ha dicho que la relación de Red Bull con Honda es mucho más estrecha que cuando el equipo austríaco tenía a Renault como proveedor de motores.
Hubo claras tensiones entre el director del equipo Red Bull, Christian Horner, y el exjefe de Renault, Cyril Abiteboul, cuando el fabricante francés suministró motores a Red Bull, dada su falta de rendimiento en comparación con sus rivales Mercedes y Ferrari.
Desde entonces, el cambio a Honda ha demostrado ser beneficioso para Red Bull no solo en términos de rendimiento, sino, como dijo el líder del Campeonato Mundial, en términos de cómo trabajan juntos en el día a día: "La relación es diferente ahora, simplemente porque trabajamos mucho más integrados que antes", dijo Verstappen a los periodistas.
“Es una mentalidad muy diferente, y no lo digo para criticar a Renault, pero es muy diferente. Realmente disfruto trabajar con Honda”. Red Bull Powertrains ahora se ha establecido a raíz de la inminente partida de Honda y, aunque la marca japonesa continuará ayudando al equipo en su desarrollo hacia 2022 como una transición, han dicho desde entonces cuando se trata de la llegada de la nueva fórmula de motor en 2026, Red Bull diseñará su nueva unidad de potencia sin ayuda.
La campaña de reclutamiento del equipo les ha llevado a buscar a varios miembros de la división de unidades de potencia de Mercedes. Con las piezas que comienzan a encajar en su lugar en preparación para convertirse en su propio equipo de "fábrica" para el suministro de motores, su piloto principal se siente feliz con el esfuerzo que el equipo está invirtiendo en el proyecto.
"Por supuesto, estamos totalmente comprometidos con eso ahora, así que tengo mucha confianza en eso", dijo Verstappen. “Solo el tiempo mostrará cómo irá. No puede completar eso todavía. Red Bull, por supuesto, está haciendo todo lo posible para que sea un éxito".
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