El equipo estadounidense terminó el campeonato en novena posición en la clasificación y sin duda este resultado también se debió a la falta de potencia que ofrecía el propulsor de Ferrari.
Teniendo en cuenta la congelación de los monoplazas 2020, que también se verán en la pista la próxima temporada, Gunther Steiner dijo que era consciente de que tampoco el año que viene habrá esperanzas de una mejora clara.
Sin embargo, espera que el nuevo motor de Ferrari permita a Haas hacer algunos pequeños avances: "Estoy seguro de que será otro año difícil aunque no sepa lo difícil que será, pero hay elementos que están fuera de mi control y espero que nos ayuden a mejorar. Obviamente tenemos que trabajar duro en el coche, esforzarnos mucho durante estas breves vacaciones de invierno. Esto es lo único que podemos hacer en este momento, pero espero que alguien más pueda ayudarnos".
Para tratar de mantener bajos los costos, Haas no ha realizado actualizaciones importantes en su automóvil durante la temporada 2020 y esto ha afectado significativamente el resultado final. Sin embargo, a la vista de 2021, el equipo estadounidense ha planeado algunos desarrollos que deberían permitir que el equipo muestre algún progreso incluso si Steiner se ha mostrado escéptico al respecto.
“Estamos trabajando duro, pero es difícil emitir un juicio considerando que hemos estado sometidos a estas actualizaciones durante unos 3 o 4 meses. El problema no ha dependido de que nuestros rivales hayan aportado numerosas novedades a la pista, sino de nuestra necesidad de mantener bajos los costes para gestionar el presupuesto”.
“En cualquier caso, creo que el año que viene será ciertamente difícil porque no tenemos un coche competitivo como base. La realidad, sin embargo, solo la descubriremos en Barcelona durante las pruebas y en Australia durante la primera sesión de clasificación".
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