Parte de esto ocurre en condiciones tan resbaladizas, como la escena justo después de la salida cuando solo quería evitar el Renault de Esteban Ocon e hizo un trompo. Cuando intentó ponerse al día después de la avería, Bottas no lo hizo muy bien, como muestra la colisión con Ocon en la curva 9. Desde tan atrás, la maniobra fue al menos optimista, probablemente incluso burda. Y está en marcado contraste con el enfoque de Lewis Hamilton.
Mientras un piloto de Mercedes esperaba las vueltas y esperaba su oportunidad, el otro simplemente hizo todo lo posible y desperdició sus posibilidades de puntos en la primera vuelta. Ya no es necesario hablar sobre el título en este momento. No creo que Bottas haya perdido eso en Estambul. Una mirada al estado actual del Campeonato del Mundo de Fórmula 1 es suficiente para saber cuál ha sido la hora:
Hamilton ha ganado diez de las 14 carreras hasta ahora, Bottas dos. Por lo tanto, estuvo claro durante mucho tiempo que las ambiciones del título de Bottas serían principalmente de naturaleza teórica, siempre que fuera matemáticamente posible. Bottas no es un verdadero oponente para Hamilton. Nunca lo fue y probablemente nunca lo será. No durante toda una temporada, porque le falta consistencia, Hamilton simplemente terminó para él.
Por cierto, este es un hallazgo que incluso el director deportivo de Mercedes, Toto Wolff, representa de manera similar. Dijo después del Gran Premio de Turquía, y fíjense en sus palabras: "Valtteri ha hecho muy buenas actuaciones este año, pero se cayó hacia el final. Algunas actuaciones realmente buenas", eso le pega bastante bien. Como ganar la primera carrera de la temporada en Spielberg o sus poles en Silverstone, Nürburgring o Imola. Estos fueron puntos aislados que puso contra Hamilton, pero no lo suficiente como para defenderse seriamente en la pelea por el título.
"Me gustan Valtteri y Lewis. Cuando Lewis tiene un mal día, Valtteri lo logra, y viceversa. Valtteri tuvo un mal día y Lewis gana la carrera. Creo que esta combinación funciona muy bien para el equipo", agrego Wolff. El problema desde el punto de vista de Bottas: Hamilton tiene muy pocos de estos "días malos" para que Bottas los use. Y así está en la segunda fila de Mercedes, aunque de vez en cuando señala pero nunca recupera. En resumen: el compañero ideal de Hamilton, el coleccionista de títulos.
En cualquier caso, nada salió bien para Bottas en Estambul. Por supuesto: después del trompo al principio y la colisión en mangas de camisa con Ocon, la carrera había terminado para él de todos modos. Bottas lo sabía: cualquier otra cosa que no fuera la victoria prácticamente no le ayudaría a seguir luchando por el título. No puedes culparlo por el riesgo adicional. Lo intentó, no debería ser, todavía se hizo más grueso. Hamilton lo dobló en la vuelta 45 fue el punto culminante negativo.
¿Y el año que viene?. Bottas tiene un destino similar, si Hamilton vuelve a firmar con Mercedes, como se esperaba. Y si no, Bottas tendrá que estirarse mucho ante un Max Verstappen en el Red Bull, que podrá pelear con él por el título de "Best of the Rest" en las tres carreras restantes en 2020. Bottas no es un piloto de alto vuelo en la Fórmula 1. Esto no solo lo demostró el Gran Premio de Turquía 2020, en el que algunos otros pilotos destacados tambien fallaron, sino su forma anterior al lado de Hamilton desde 2017. La conclusión es que simplemente no es suficiente contra el mejor piloto de su tiempo.
Sabiendo esto, Bottas probablemente no tuvo una noche muy tranquila. Y también me atrevo a decir: no fue ni su primera noche inquieta desde 2017, ni fue la última en sus días en Mercedes.
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