Ayer habló de un camino perdido y la necesidad de encontrar respuestas, pero al parecer la noche debió haber traído un consejo a Maverick Viñales, porque el piloto español ha encontrado una pole position, la primera de la temporada y la décima en su carrera en MotoGP, cuánto nunca inesperado en el Red Bull Ring.
En una pista de motores como la austriaca, todo el mundo habría esperado ver una Ducati o una KTM en la pole, pero sorprendentemente hay una Yamaha.
Efectivamente, hay dos en la primera línea de parrilla, con el de Fabio Quartararo en tercera posición.
Viñales sacó un 1'23"450, ganando por solo 68 milésimas en la Ducati con los colores de Pramac Racing confiados a Jack Miller, el único seguro de un lugar en el equipo rojo de fábrica el próximo año, al final de una batalla por la pole position que era realmente estrecha, con los primeros cinco encerrados en el espacio de sólo 162 milésimas.
En tercera posición, como ya se mencionó, hay un Quartararo que es el único que siempre ha salido desde la primera línea esta temporada y a su vez ha terminado a tan solo 87 milésimas del otro M1.
Si se desea, los perdedores de la jornada son Andrea Dovizioso y Pol Espargaró, que parecen ser los grandes favoritos a la pole position, pero se han tenido que conformar con el cuarto y quinto puesto respectivamente en parrilla. Para el piloto de Forlì, sin embargo, el primero en separarse en casa con Ducati fue la mejor calificación de la temporada. KTM, en cambio, quizás al menos soñaba con la primera fila en casa.
Completando la segunda fila está Joan Mir con una Suzuki que sigue teniendo su punto débil en la calificación, como confirma la octava plaza de Alex Rins. La Yamaha Petronas de Franco Morbidelli también se insertó entre las dos GSX-RR. La tercera fila termina luego con la otra Ducati de Johann Zarco, autor del mejor tiempo en la Q1.
Con la décima posición, Takaaki Nakagami fue el único piloto de Honda en llegar a la Q2, lo que demuestra cuánto se está haciendo sentir la ausencia del lesionado Marc Márquez. Detrás de los japoneses están la KTM Tech 3 de Miguel Oliveira y la Yamaha de Valentino Rossi, que, tras pasar por un pelo la Q1, luchó mucho más duro en el segmento decisivo y volverá a estar en cuarta fila.
Fue un duelo de italianos para evitar la eliminación en la Q1 y al final fue Danilo Petrucci quien se llevó la peor parte. El ducatista bajó de 1'24 "con un 915 de 1'23", pero Rossi se burló por apenas 24 milésimas. "Petrux" abrirá así una quinta fila que lo verá con la Aprilia de un Aleix Espargaró a su lado, al que también le había faltado haberle obstaculizado en una vuelta de frenada rápida en la curva 3 y luego también en la última curva, con mucho dedo medio una vez que ambos han vuelto al pitlane tras la bandera a cuadros.
Decimoquinto puesto en la parrilla para el Honda LCR de Cal Crutchlow, mientras que en la sexta fila le siguen las dos KTM de Iker Lecuona y Brad Binder, esperadas esta vez en una carrera decididamente cuesta arriba tras ganar la semana pasada en Brno. Un pequeño paso adelante para Alex Márquez, incluso si un puesto 18 en la parrilla no es un resultado para celebrar para un piloto oficial de Honda.
En la parte trasera del grupo, en lugar de Michele Pirro, piloto de pruebas de Ducati llamado por Pramac Racing para ocupar el lugar del lesionado Pecco Bagnaia.
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