El equipo campeón del mundo intenta contrarrestar la superioridad del motor de Ferrari con el último paquete aerodinámico destinado al W10: en Suzuka, el equipo de Brackley quiere reafirmar su supremacía, mientras que Wolff ha rechazado la introducción de nuevos motores en Brixworth.
El Mercedes no se sienta en los laureles luego de Sochi. En efecto. El equipo de Brackley después del doblete en Rusia quiere volcar la mesa en Suzuka: las flechas plateadas, de hecho, se beneficiarán del último paquete de desarrollo aerodinámico en el W10, ya que el personal técnico dirigido por James Allison ya está trabajando en el monoplaza del 2020.Habiendo alargado la lista de victorias en Rusia, y con el undécimo triunfo de la temporada el equipo consiguió un nuevo impulso, y Toto Wolff, consciente de que Lewis Hamilton y Valtteri Bottas están con un coche menos competitivo que el Ferrari. No hay duda de que con el último desarrollo aerodinámico llevado a la pista en Singapur, el equipo del Cavalinho parece haber resuelto mágicamente los problemas del SF90.
El equipo rojo ahora logra ejecutar los neumáticos en la ventana de temperatura correcta, confiando en la unidad de potencia más potente, y Mercedes, por otro lado, tuvo que reducir la potencia del motor de Fase 3 para hacer frente a los inesperados problemas de confiabilidad que surgen después del sobrecalentamiento repetido.
Su intención era llevar un núcleo de ingenieros alemanes al grupo de trabajo de Andy Cowell con la creencia de que el proyecto F1 M10 EQ Power + 6 cilindros había llegado a su fin al final de su desarrollo, mientras que el duro Toto Wolff no quiere ningún malestar después de la teoría de que el equipo ganador no se toca.
El déficit del motor (y, aparentemente, la gasolina) debe cubrirse con soluciones aerodinámicas y de chasis capaces de exprimir todo el potencial del W10: se espera un paquete aerodinámico importante en Suzuka, después de revisar el tercer elemento del suspensión delantera mecánica, completa con muelles Belleville, en lugar del sistema hidráulico.
El experimento está dirigido a 2021, cuando los autos de F1 tendrán que volver solo a la suspensión delantera mecánica. Es curioso que Ferrari esté preparando el auto del próximo año con el tercer elemento hidráulico.
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