Renault está dispuesto a recibir penalizaciones en favor de probar nuevos elementos

Renault está dispuesto a "comprometer" aspectos de su temporada 2019 como parte de su objetivo de alejarse del mediocampo, a raíz de los problemas de confiabilidad. Renault aseguró en la pretemporada que había logrado ganancias de rendimiento y confiabilidad con su unidad de potencia, pero ha tenido varios problemas durante la apertura del campeonato.

El MGU-K, que ha sido una debilidad en los últimos años, ha sido el culpable de algunos contratiempos, ya que se sospecha que un problema de software detiene a Nico Hulkenberg en China. Eso se produjo tras la introducción de una especificación actualizada en respuesta a los problemas que afectaron a Renault en Baréin, así como al fracaso que truncó la carrera del piloto de McLaren Carlos Sainz Jr. en Australia.

Los cuatro pilotos con motor Renault están en su segundo MGU-K de la campaña, lo que significa que un reemplazo más resultará en una penalización de 10 lugares en la parrilla, según las estrictas regulaciones de motores de la Fórmula 1. El jefe del equipo Renault, Cyril Abiteboul, ha insinuado que el fabricante puede recibir la penalización para poder acelerar su comprensión de sus debilidades.

"Hemos tenido otro retiro en China, el cuarto, tres de ellos se debieron a problemas de confiabilidad", dijo.
"Si nuestro objetivo esta temporada, es ampliar la brecha del mediocampo, debemos aceptar realizar grandes esfuerzos para resolver estos problemas que podrían comprometer nuestra temporada. Sin embargo, seguiremos adelante y traeremos nuevos elementos en las próximas carreras".

"Bakú es a menudo impredecible, las carreras allí son emocionantes y es una oportunidad para capitalizar los errores de los rivales mientras evitamos hacer algunos nosotros mismos". A pesar de los contratiempos de fiabilidad, Renault ocupa la cuarta posición en el Campeonato de Constructores, aunque esté a la altura de los puntos con Alfa Romeo, aunque a 40 puntos de Red Bull.