Al mismo tiempo, la cancelación de la carrera de Shanghai reabrió las puertas del Circo de Imola, que al igual que en 2020 acogerá el Gran Premio de Emilia Romagna, duplicando las carreras en italia del próximo Campeonato del Mundo. Si la situación no evoluciona positivamente en las próximas semanas, no se puede descartar una nueva intervención de los organizadores, pero esto no asusta a Zandvoort.
El circuito holandés, que debería haber hecho su regreso al calendario en 2020, sigue firmemente convencido de su deseo de volver a acoger la F1 35 años después de la última vez, gracias también a una nueva colocación en el mes de septiembre entre los Grandes Premios de Bélgica en Spa y de Italia en Monza: "Dudo que en esta situación alguien realmente pensara que Melbourne se llevaría a cabo en marzo", dijo Jan Lammers.
El promotor principal del evento habló con el periódico local NOS. "Australia tiene medidas severas para combatir el Covid-19, pero el cambio en el calendario no afectan de ninguna manera a Zandvoort. Estamos encantados de que nuestra carrera se desarrolle en la segunda mitad de la temporada. Nada amenaza el hecho de que podamos correr el 5 de septiembre”.
“Originalmente planeamos tener el Gran Premio en mayo, pero esto podría haber planteado interrogantes una vez más. Es poco probable que hubiéramos sido capaces de tener espectadores en las gradas en mayo, por lo que la fecha se adapta mejor a nuestras intenciones en septiembre”, concluyó Lammers.
Comentarios
Publicar un comentario